sábado, 27 de junio de 2009

¿Quiénes somos y qué objetivos tenemos? Nuestra historia...

Nosotros, somos un conjunto de países industrializados del mundo con un peso político, económico y militar muy relevante a escala global. Estamos conformados por, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, Japón, Canadá y Rusia es así que se nos denomina el grupo de los 8 (ver mapa). El hecho de pertenecer al grupo, no se basa en un único criterio, ya que no somos los ocho países más industrializados, ni los de mayor renta per cápita ni los que contamos con un mayor Producto Interior Bruto. En todo caso, la pertenencia no sigue criterios democráticos mundiales.
Nuestros orígenes, comenzaron a establecerse en marzo de 1973 cuando, a pedido del Secretario de Tesoro estadounidense, George Shultz, se reunieron los ministros de finanzas de Estados Unidos, Japón, Alemania Occidental, Italia, Francia y el Reino Unido. Luego de esta junta, en 1976, en Puerto Rico, se unió a esta parte de nuestro conjunto Canadá, conformando así el G-7. Varios años después, en 1998, se integra Rusia, dando lugar a nuestro nombre actual (G-8). Ésta integración de Rusia se dio por el esfuerzo del país por incorporarse a la economía de mercado, aunque también el hecho de que sea una potencia nuclear debe haber influido.




Anualmente, nos reunimos en lugares pertenecientes a alguno de los miembros en la llamada Cumbre del G8. La finalidad de estas reuniones es analizar el estado de la política y las economías internacionales e intentar unificar posiciones respecto a las decisiones que se toman en torno al sistema económico y político mundial.
Rusia, a pesar de pertenecer al Grupo, ha estado durante todos estos años marginada en el debate de los temas económicos y financieros del G8, al no pertenecer aún a la Organización Mundial de Comercio (OMC) por sus discrepancias con Estados Unidos, único país con el que Rusia aún no ha concluido las negociaciones comerciales bilaterales para acceder a la organización multilateral, integrada por 149 países.
El G8 ha ido buscando soluciones y estrategias comunes para hacer frente a los problemas detectados, en general, en función de nuestros propios intereses. Cumbre tras cumbre, hemos descubierto bondades de la globalización neoliberal y un impulso continuo de las reformas que lo deben permitir: liberalización comercial y financiera, privatizaciones, flexibilidad del mercado laboral y políticas macroeconómicas deflacionarias como el déficit dos en el presupuesto y los elevados tipos de interés.
En fin, en cada una de nuestras cumbres, los temas a tratar básicamente son o fueron, el petróleo, la crisis que atravesó la economía mundial de los años ’70, la seguridad global, paz en el Medio Oriente, la pobreza, la salud mundial, el suministro de agua potable, la reconstrucción de Irak y el calentamiento global, además de otros problemas del medio ambiente, las iniciativas de reducción de la deuda o las ayudas en la lucha contra las enfermedades infecciosas como el sida o la malaria.
Para poder conseguir ejecutar nuestras iniciativas, el G8 cuenta con el poder de los países miembros en las instituciones internacionales como el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el Banco Mundial, el FMI o la OMC. De hecho, de los cinco miembros permanentes , con derecho a veto del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, , cuatro son miembros del G8, y en el marco del BM y el FMI los países del G8 acumulan más del 44% de los votos. En las negociaciones en el marco de la OMC, los países de nuestro grupo también acostumbraron a funcionar como un bloque formado por la UE, Japón, EE.UU y Canadá.